Si eres autónomo, seguramente te has preguntado alguna vez qué régimen fiscal te conviene más: ¿estimación directa o módulos? Esta decisión no solo afecta a los impuestos que pagarás, sino también a la forma en la que llevas tu contabilidad, los modelos que debes presentar y el tiempo que necesitarás dedicar a tus obligaciones fiscales.
En Contalia, como asesores especializados en fiscalidad para autónomos, sabemos que no hay una única respuesta válida para todos. Elegir bien depende de tu actividad, tus ingresos, tus gastos y de si cumples o no los requisitos que exige Hacienda para estar en uno u otro régimen.
En este artículo vamos a explicarte de forma clara y con ejemplos sencillos en qué consiste cada régimen, quién puede acogerse a ellos y en qué casos conviene más uno que otro.
Nuestro objetivo es ayudarte a tomar una decisión informada antes de que termine el año, para que puedas planificar bien tu fiscalidad de cara a 2026 y evitar errores comunes desde el primer trimestre.
Qué son los regímenes de estimación directa y módulos
Antes de decidir qué régimen te conviene más, es importante entender bien en qué consiste cada uno. Ambos son sistemas que utiliza Hacienda para calcular cuánto IRPF deben pagar los autónomos, pero su funcionamiento y sus obligaciones son muy distintos.
A continuación, te explicamos cada régimen por separado y las principales diferencias entre ellos.
¿Qué es la estimación directa (normal y simplificada)?
La estimación directa es un régimen fiscal que se basa en tus ingresos y gastos reales. Es decir, tributas por el beneficio que obtienes: lo que ingresas menos lo que gastas en el desarrollo de tu actividad.
Existen dos modalidades:
- Estimación directa simplificada: es la más habitual entre autónomos. Se aplica automáticamente si no superas los 600.000 € de ingresos anuales y no renuncias expresamente a ella. Requiere llevar un control de ingresos y gastos, pero no exige una contabilidad tan detallada como en la modalidad normal.
- Estimación directa normal: se aplica si superas los 600.000 € anuales o si decides optar por ella voluntariamente. En este caso, tendrás que llevar una contabilidad ajustada al Código de Comercio, como si fueras una empresa.
Ejemplo sencillo: si facturas 35.000 € al año y tienes 10.000 € de gastos deducibles (como alquiler, gestoría, suministros, etc.), pagarás IRPF por los 25.000 € restantes.
¿Qué es el régimen de módulos (estimación objetiva)?
El régimen de módulos es una forma simplificada de calcular el IRPF. En lugar de tributar por el beneficio real, Hacienda estima tu rendimiento según una serie de parámetros objetivos: metros cuadrados del local, personal contratado, consumo eléctrico, tipo de actividad, etc.
Está pensado para actividades muy concretas (como comercio minorista, transporte, hostelería…) y solo se puede aplicar si se cumplen ciertos requisitos de facturación y compras. Cada año, Hacienda publica unos límites y tablas que marcan quién puede acogerse y cuánto debe pagar.
Ejemplo sencillo: si tienes una peluquería de 30m² y no empleas a nadie, pagarás una cantidad fija en función de esos metros, aunque un mes ganes más y otro menos.
Principales diferencias entre ambos regímenes
Aspecto | Estimación directa | Módulos (estimación objetiva) |
Base del cálculo | Ingresos reales – gastos deducibles | Criterios objetivos (metros, personal…) |
Contabilidad | Simplificada o completa, según modalidad | Muy sencilla |
Obligaciones formales | Más modelos y control de facturas | Menos obligaciones formales |
Variabilidad del resultado | Cambia según beneficios reales | Cuotas fijas anuales |
Actividades permitidas | Todas | Limitado a ciertos sectores |
Requisitos de acceso | Sin requisitos especiales | Límites de ingresos, compras y actividad |
Posibilidad de deducir gastos | Sí | No (ya se estima un rendimiento fijo) |
Ambos sistemas tienen ventajas e inconvenientes, y la elección adecuada dependerá de tu situación concreta. En las siguientes secciones te ayudaremos a valorar cuál te conviene más según tu actividad, ingresos y previsión para 2025.
¿Quién puede acogerse a cada régimen en 2025?
Aunque los autónomos pueden elegir entre módulos y estimación directa, no todos pueden acceder libremente a ambos. Existen límites y condiciones establecidos por Hacienda que determinan si puedes acogerte al régimen de módulos o si, por defecto, debes tributar en estimación directa. En este apartado te explicamos con claridad cuáles son esos requisitos.
Requisitos y límites del régimen de módulos
El régimen de módulos está regulado por la Agencia Tributaria y solo se puede aplicar si se cumplen todos estos requisitos:
- Ingresos anuales por actividad económica: no superar los 250.000 € (en el conjunto de tus actividades económicas, excluidas las agrícolas, ganaderas y forestales).
- Ingresos anuales de facturación a empresas: no superar los 125.000 € si facturas a clientes que sean empresas o profesionales.
- Compras de bienes y servicios: no superar los 250.000 € al año (sin incluir inversiones).
Además, es necesario no haber renunciado al régimen expresamente en años anteriores y no haber sido excluido por superar los límites.
Estos importes se calculan sobre el año anterior. Es decir, si en 2024 superaste alguno de los límites, en 2025 no podrás seguir en módulos.
Actividades permitidas y excluidas
No todas las actividades económicas pueden tributar en módulos. La Agencia Tributaria publica cada año un listado con los epígrafes del IAE (Impuesto de Actividades Económicas) que pueden acogerse a este régimen.
Algunas de las actividades permitidas más comunes son:
- Comercio minorista (tiendas, panaderías, mercerías…)
- Hostelería (bares, cafeterías, restaurantes)
- Peluquerías y centros de estética
- Transporte de mercancías por carretera
- Reparación de vehículos
Por otro lado, quedan excluidas actividades profesionales como:
- Abogados, arquitectos, médicos o consultores
- Actividades que se presten mayoritariamente a empresas
- Actividades no incluidas en la orden de módulos publicada por Hacienda
En resumen: si ejerces una actividad profesional (como asesoría, diseño gráfico o consultoría), lo más habitual es que debas tributar en estimación directa.
¿Cuándo se aplica la estimación directa por defecto?
La estimación directa se aplica por defecto cuando:
- No te acoges al régimen de módulos voluntariamente.
- Tu actividad no está incluida entre las permitidas para módulos.
- Superas los límites de facturación o compras del año anterior.
- Renuncias al régimen de módulos de forma expresa (presentando el modelo 036/037) o tácita (por ejemplo, presentando directamente el modelo 130).
Además, si te das de alta por primera vez como autónomo, entrarás directamente en estimación directa simplificada, a menos que renuncies expresamente y cumplas los requisitos para módulos.
¿Qué régimen fiscal te conviene más como autónomo?
Una de las preguntas más habituales que nos hacen en Contalia es: “¿Qué régimen me interesa más según mi actividad?” Y la respuesta siempre es la misma: depende.
No hay una fórmula única, pero sí podemos ayudarte a identificar qué opción puede ser más beneficiosa para ti en función de tus ingresos, tus gastos y tu tipo de actividad.
Casos en los que conviene módulos
El régimen de módulos puede ser una opción interesante si:
- Tus ingresos reales son altos, pero los parámetros que usa Hacienda (metros, personal, consumo…) no reflejan ese nivel de facturación. Así, puedes pagar menos impuestos que si tributaras por beneficio real.
- Tienes pocos gastos deducibles. En este caso, la estimación directa no te permitirá reducir apenas la base imponible.
- Prefieres simplicidad administrativa: el régimen de módulos exige menos obligaciones contables, lo que puede ahorrarte tiempo y costes de gestoría.
- Tu actividad está incluida entre las permitidas por Hacienda y no superas los límites de facturación.
Ejemplo: un pequeño bar con pocos trabajadores y local reducido puede pagar menos en módulos, incluso si tiene ingresos altos, porque su rendimiento se estima con variables limitadas.
Casos en los que conviene estimación directa
La estimación directa suele ser la mejor opción cuando:
- Tienes muchos gastos deducibles (alquiler, suministros, vehículos, material…). Cuantos más gastos puedas justificar, menor será la base sobre la que pagarás impuestos.
- Eres profesional o prestas servicios a empresas, y no puedes tributar en módulos.
- Tus ingresos reales son bajos o irregulares: en este caso, pagarás menos que si Hacienda te aplicara una estimación fija como en los módulos.
- Necesitas justificar tu beneficio real para otros fines (como solicitar financiación o subvenciones).
Ejemplo: un diseñador gráfico que trabaja desde casa y factura 22.000 € al año, pero tiene muchos gastos deducibles (ordenador, internet, coworking), probablemente pague menos en estimación directa.
Comparativa práctica: ingresos, gastos y ahorro fiscal
Veamos una comparativa aproximada entre los dos regímenes. Imaginemos dos autónomos con actividades similares:
Concepto | Estimación directa | Módulos |
Ingresos anuales | 30.000 € | 30.000 € |
Gastos deducibles | 10.000 € | No se tienen en cuenta |
Base imponible IRPF | 20.000 € | Fijada por Hacienda (ej. 25.000 €) |
Tipo impositivo medio IRPF (15%) | 3.000 € | 3.750 € |
Cuota final aproximada | 3.000 € | 3.750 € |
En este caso, el autónomo con muchos gastos paga menos en estimación directa. Pero si no tuviera apenas gastos, el resultado podría invertirse.
¿Qué pasa si superas los límites de módulos?
Si superas los límites de facturación o compras establecidos para el régimen de módulos, Hacienda te excluye automáticamente para el ejercicio siguiente. En ese caso, pasarás a tributar en estimación directa simplificada desde el 1 de enero, sin posibilidad de volver a módulos durante los tres años siguientes.
Esto puede suponer:
- Una carga administrativa mayor (más libros, modelos y control).
- Un pago más alto si no estás preparado para deducir correctamente todos tus gastos.
- La necesidad de adaptar tu contabilidad con ayuda profesional.
Consejo clave: si crees que vas a acercarte a los límites, lo mejor es que empieces a prepararte para el cambio con tiempo y te asesores correctamente.
Obligaciones fiscales en cada régimen
Una de las grandes diferencias entre estimación directa y módulos está en las obligaciones fiscales y contables que conlleva cada uno. En esta sección te contamos qué modelos debes presentar en cada caso, qué tipo de contabilidad exige Hacienda y qué gastos puedes deducir si tributas en estimación directa.
Modelos que se deben presentar
Aunque ambos regímenes están dentro del IRPF, la forma de declarar tus ingresos varía. Estos son los modelos que tendrás que presentar en cada caso:
Tipo de modelo | Estimación directa | Módulos (estimación objetiva) |
Pago fraccionado IRPF | Modelo 130 (trimestral) | Modelo 131 (trimestral) |
IVA (si aplica) | Modelo 303 (trimestral) + 390 (resumen anual) | Modelo 303 (trimestral) + 390 (anual) |
Retenciones | Modelo 111 (si pagas a profesionales) | Igual |
Resumen anual IRPF | Modelo 100 (declaración de la renta) | Modelo 100 |
Otros | Modelo 347 (operaciones con terceros), 349 (intraUE) | Igual si corresponde |
Importante: en módulos, el pago fraccionado se calcula automáticamente con una cuota fija. En estimación directa, se aplica un porcentaje sobre el beneficio real.
Qué tipo de contabilidad exige cada uno
Estimación directa simplificada
Obligaciones contables básicas
- Libro de ingresos
- Libro de gastos deducibles
- Libro de bienes de inversión (si corresponde)
- Libro de ventas e ingresos (si tributas en régimen de IVA)
Estimación directa normal: contabilidad ajustada al Código de Comercio (como una empresa).
Régimen de módulos
Contabilidad mucho más simple:
- Solo necesitas conservar facturas de ingresos y gastos.
- No estás obligado a llevar libros contables específicos.
- Si tributas en IVA, deberás llevar libros registro de IVA (ventas y compras).
Este es uno de los motivos por los que muchos autónomos con actividades sencillas prefieren módulos: requieren menos gestión administrativa.
Qué gastos se pueden deducir
Esta es una de las grandes ventajas de la estimación directa: puedes deducirte todos aquellos gastos relacionados con tu actividad económica, siempre que estén justificados y correctamente registrados.
Gastos deducibles habituales
- Alquiler del local o del coworking
- Suministros (luz, internet, agua…)
- Material y herramientas
- Asesoría o gestoría
- Teléfono profesional
- Transporte o vehículo (si se justifica su uso laboral)
- Formación, suscripciones o software
En el régimen de módulos, no puedes deducirte gastos directamente. Hacienda ya aplica una estimación del beneficio neto, por lo que no tienes que justificar gastos, pero tampoco puedes usarlos para pagar menos impuestos.
Resumen
- Si tienes muchos gastos → la estimación directa te permite reducir la base imponible.
- Si apenas tienes gastos → los módulos pueden ser más rentables y cómodos.
¿Puedo cambiar de régimen fiscal si ya soy autónomo?
Sí, como autónomo puedes cambiar de régimen fiscal, pero es importante tener en cuenta los plazos, condiciones y consecuencias del cambio. Esta decisión debe tomarse con previsión y, preferiblemente, con asesoramiento profesional, ya que afecta a tus obligaciones fiscales y a la forma en la que tributarás durante todo el ejercicio.
Cómo pasar de módulos a estimación directa (y viceversa)
Para pasar de módulos a estimación directa, basta con renunciar al régimen de módulos de forma expresa o tácita. Esto se puede hacer:
- Expresamente: marcando la casilla correspondiente en el modelo 036 o 037 al inicio de un nuevo año.
- Tácitamente: si presentas directamente los modelos propios de estimación directa (como el modelo 130), Hacienda entiende que has renunciado a módulos.
Para volver de estimación directa a módulos, es necesario que:
- Tu actividad esté incluida entre las que permiten tributar en módulos.
- No hayas superado los límites de facturación y compras del año anterior.
- No estés dentro del período de exclusión de 3 años tras haber renunciado o haber sido excluido.
Es decir, no se puede volver a módulos inmediatamente después de haber salido, salvo que hayan pasado tres ejercicios completos.
Plazos y procedimientos para el cambio
El cambio de régimen fiscal solo se puede hacer al inicio del año natural, nunca a mitad del ejercicio.
- El plazo para solicitar el cambio (o renunciar) va desde el 1 de diciembre hasta el 31 de diciembre del año anterior al que se quiera aplicar.
- Se realiza mediante la presentación del modelo 036 o 037, en el apartado correspondiente al régimen de IRPF.
Ejemplo: si quieres cambiar a estimación directa en 2026, debes presentar el modelo 036/037 durante diciembre de este año 2025. Si no lo haces, seguirás tributando como en el año anterior.
¿Se puede cambiar a mitad de año?
No. Los regímenes fiscales se aplican por ejercicios completos y no se pueden modificar a mitad de año, salvo situaciones excepcionales como el inicio de actividad.
Las únicas situaciones que implican un cambio automático durante el año son:
- Superación de los límites del régimen de módulos: si en un ejercicio te pasas de los topes de facturación o compras, al año siguiente Hacienda te excluye automáticamente.
- Inicio de actividad como autónomo: si te das de alta por primera vez, se aplica estimación directa simplificada salvo que indiques expresamente tu voluntad de tributar en módulos (y cumplas los requisitos).
En cualquier otro caso, el cambio solo es posible de forma voluntaria y con efecto a partir del 1 de enero del año siguiente.
Consejos prácticos para elegir el régimen adecuado
Elegir entre módulos y estimación directa no es una decisión menor. Afecta directamente a los impuestos que pagarás cada trimestre y a la gestión diaria de tu actividad como autónomo.
Por eso, antes de decidirte por uno u otro, conviene que hagas algunos cálculos y, si tienes dudas, cuentes con asesoramiento experto.
Cómo estimar tu ahorro fiscal
El primer paso para tomar una decisión informada es calcular cuánto pagarías en cada régimen. Para eso, necesitas tener en cuenta:
- Tus ingresos aproximados para el año fiscal.
- Los gastos deducibles que puedes justificar: alquiler, suministros, gestoría, transporte, herramientas, etc.
- Tu situación personal y familiar, ya que afecta al tipo impositivo del IRPF.
- El rendimiento estimado que aplicaría Hacienda si tributaras en módulos, según los parámetros fijados (metros del local, número de empleados, etc.).
Una buena práctica es comparar lo que pagarías en IRPF y en IVA bajo cada régimen. Si el beneficio real (ingresos – gastos) es más bajo que la estimación objetiva de Hacienda, probablemente la estimación directa sea más conveniente. Si es al revés, los módulos pueden resultarte más rentables.
Usa simuladores o asesórate con un profesional
Hoy en día existen herramientas online que te permiten hacer simulaciones básicas de lo que pagarías en uno u otro régimen. Son útiles como punto de partida, pero suelen simplificar demasiado la realidad fiscal de un autónomo.
En Contalia siempre recomendamos apoyarse en un profesional que:
- Analice tu caso concreto con datos reales.
- Tenga en cuenta todos los gastos que puedes deducir.
- Valore si hay posibilidad de optimizar tu situación fiscal.
- Evalúe cómo podría afectar el cambio de régimen a tu planificación a medio plazo.
Un asesor fiscal para autónomos no solo te ayuda a elegir el régimen adecuado, sino también a mantenerte dentro de los límites, planificar los pagos trimestrales y evitar errores que puedan implicar sanciones o la exclusión del régimen de módulos.
¿Qué hacemos en nuestra asesoría para ayudarte?
En Contalia llevamos años ayudando a autónomos de todos los sectores a gestionar su fiscalidad de forma eficiente. Si tienes dudas sobre qué régimen te conviene más o estás pensando en cambiar tu forma de tributar en 2025, te ofrecemos:
- Un estudio personalizado de tu caso, con estimaciones reales comparando módulos y estimación directa.
- Asesoramiento en el cambio de régimen, gestionando los trámites necesarios ante Hacienda.
- Planificación fiscal durante todo el año, para que no pagues de más ni tengas sorpresas en la declaración de la renta.
- Acompañamiento continuo, con una atención cercana y clara, sin tecnicismos innecesarios.
Porque entendemos que tú necesitas centrarte en tu negocio, y nosotros estamos aquí para ayudarte con lo demás.
Elegir bien tu régimen fiscal es clave en 2025
Como has visto, elegir entre estimación directa y módulos no es una decisión automática. Depende de tu tipo de actividad, tus ingresos, tus gastos y tu situación personal.
En Contalia te ayudamos a valorar todas estas variables para que puedas optimizar tu fiscalidad y centrarte en lo importante: hacer crecer tu negocio.
Si tienes dudas o necesitas cambiar de régimen para 2026, estamos aquí para acompañarte paso a paso, con un lenguaje claro, sin complicaciones y con la experiencia de un equipo especializado en autónomos.
Preguntas frecuentes sobre estimación directa y módulos
A continuación respondemos algunas de las preguntas más habituales que se hacen los autónomos cuando tienen que elegir entre estimación directa y módulos. Si tú también tienes dudas, puede que aquí encuentres justo la respuesta que necesitas.
¿Qué es mejor: módulos o estimación directa?
No hay una opción mejor para todos. La clave está en tu tipo de actividad, tus ingresos, tus gastos y si cumples o no los requisitos para estar en módulos.
Si tienes pocos gastos y actividad incluida en módulos, puede convenirte más este régimen.
Si tienes muchos gastos deducibles o ingresos irregulares, la estimación directa suele ser más ventajosa.
Lo ideal es hacer una comparativa personalizada.
¿Cómo saber si estoy en módulos o estimación directa?
Puedes consultarlo en tu censo de actividades económicas (modelo 036/037) o en tus declaraciones trimestrales:
Si presentas el modelo 131, estás en módulos.
Si presentas el modelo 130, tributas en estimación directa.
También puedes preguntar a tu asesoría o consultarlo en tu perfil de la Agencia Tributaria.
¿Qué régimen fiscal tiene menos obligaciones contables?
El régimen de módulos es mucho más sencillo desde el punto de vista administrativo:
No es obligatorio llevar libros contables detallados.
No se deducen gastos ni se calcula beneficio real.
En cambio, la estimación directa (especialmente en su modalidad normal) requiere llevar libros de ingresos, gastos y, en algunos casos, contabilidad completa.
¿Qué modelo se presenta en cada caso?
Ambos regímenes comparten modelos de IVA, pero se diferencian en cómo se calcula el IRPF trimestral.
Régimen | Modelo IRPF trimestral | Otros modelos relevantes |
---|---|---|
Estimación directa | Modelo 130 | 303, 390, 347, 111 (según actividad) |
Módulos (estimación objetiva) | Modelo 131 | 303, 390, 347, 111 (según actividad) |
¿Cuál es más rentable si tengo pocos gastos?
Si tienes pocos gastos deducibles, el régimen de módulos puede resultarte más rentable, ya que no necesitas justificar gastos ni registrar tantas operaciones.
Eso sí, dependerá también de:
- Tus ingresos reales.
- Los parámetros que Hacienda utilice para calcular tu rendimiento en módulos.
- Si puedes o no estar en ese régimen según tu actividad.
Por eso, aunque a simple vista parezca más ventajoso, es fundamental hacer un estudio caso por caso.